En marzo de 1988 aparecía una de las obras más emblemáticas del llamado desembarco inglés en el comic norteamericano: The killing joke, novela gráfica que cambiaría para siempre el tono del universo del hombre murciélago. Fruto de la colaboración del guionista Alan Moore y el dibujante Brian Bolland la historia es un thriller psicológico que narra uno de los tantos escapes del Joker del asilo Arkham. Esta vez decidido a torturar al comisionado Gordon el Joker pierde la pátina de Principe payaso adquirida en la serie televisiva protagonizada por Adam West, para recuperar el matiz tétrico que lo vio nacer, basado en la imagen cinematográfica siniestra de El hombre que ríe, basada en el clásico de Víctor Hugo e interpretada por Conrad Veidt en 1928.
La narración dejaría como saldo un cambio decisivo en el universo DC ya que antes de secuestrar al comisionado y someterlo a las más viles torturas, el Joker dispara a quemarropa sobre su hija, Barbara Gordon, dejándola lisiada. En la continuidad DC Barbara Gordon había tomado el manto de Batgirl en el número 359 de Detective comics (enero de 1967) en la historieta titulada «¡El debut del millón de dólares de Batgirl!» con guión de Gardner Fox y dibujo de Carmine Infantino, convirtiéndose en uno de los personajes más entrañables de la franquicia, tanto es así que los guionistas de DC liberaron al personaje de su rol como Batichica sin abandonarlo, logrando una de las reinvenciones más sólidas en lo que hace a este tipo de ficciones. John Ostrander transformaría a la exbibliotecaria, especialista en buscar información, en la hacker Oráculo, un recurso esencial de Batman y de la Liga de la Justicia, quien terminaría dirigiendo su propio grupo de heroínas: Birds of Prey.
Posiblemente el nostálgico Dan Didio fuera quien recuperaría el manto de Batgirl para Barbara Gordon con el reinicio que significaron los new 52 luego del evento Flashpoint.
Para no borrar de la continuidad una obra de la envergadura de The Killing Joke esta nueva colección, con el control narrativo de Gail Simone, quien ya se ocupase del personaje en Birds of Prey, nos presenta a Barbara tres años después de haber sufrido el salvaje ataque del Joker, luego de someterse a varias operaciones y una dura recuperación, tratando de tomar nuevamente las riendas de su vida y decidida a superar sus traumas personales una vez más vestida con el manto del murciélago.
En su momento The killing Joke abrió una discusión acerca de la violencia a la que eran sometidos los personajes femeninos en este tipo de ficciones, por lo que devolver el protagonismo a Barbara Gordon como la parapléjica heroína Oráculo fue una suerte de vindicación, pero una guionista veterana como Gail Simone no perdería la oportunidad de guiar al personaje en un verdadero retorno a la grandeza.
Nos encontramos entonces frente a una Barbara Gordon que intenta superar el stress postraumático mientras comienza una nueva andadura como heroína. Un nuevo camino de autoconocimiento que la lleva a paralizarse en varias oportunidades, cada una de ellas con un costo aparejado. Un arco argumental subyacente que recorrerá todo el ciclo de Simone a cargo de la cabecera que nos presenta a Charise Carnes, una de las tantas víctimas de la violencia en Gotham, quien perdió en una ordalía de sangre a su acaudalada familia y fue falsamente acusada del crimen y encerrada en el asilo Arkham.
Rehabilitada y con su nombre limpio de toda mácula Charise asumirá la personalidad de Knightfall y desarrollará un plan para limpiar Gotham de manera definitiva y sin concesiones. Batgirl será la principal antagonista para los planes de Charise una vez que decide no unirse en su plan de exterminio. En este sentido Batgirl resurge también como una heroína social que se pregunta cuál es el sentido ético de defender la propiedad privada de la parte más pudiente de la sociedad en una ciudad en la que la brecha entre el desamparo y la oligarquía es tan pronunciada como en Gotham. En tanto Barbara Gordon tendrá la oportunidad de volver a enfrentarse cara a cara con su mayor demonio, el Joker. Así también Simone reescribirá en esta línea temporal parte de la biografía de la familia Gordon, recuperando al personaje de su madre, exesposa del comisionado, su hermano James, un psicótico peligroso y reafirmando la paternidad biológica del comisionado con Barbara.
Veremos cómo Gotham amenaza con hundir a Batgirl en la oscuridad y la enfrentará al comisionado (su padre).
Otro de los puntos fuertes de los guiones de Simone es su solvencia en los diálogos internos, lo que nos hace empatizar con el personaje.
Una lectura mainstream divertida que retoma a un querido personaje del pasado para devolverlo a su momento de apogeo. Quedarán también quienes desilusionados extrañen a Oráculo, la mente maestra detrás de la silla de ruedas, pero no hay dudas que ninguna de las batgirls que tomaron el manto con posterioridad a The killing Joke se acercaron al carisma de la hija del comisionado.
Título: Batgirl Returns omnibus
Guión: Gail Simone, ray Fawkes, Marguerite Bennett
Dibujo: Ardian Syaf, Fernando Pasarin, Ed Benes, otros
Idioma: Inglés
Editorial: DC
960 páginas
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